En Pulimentos Abel y Fran realizamos trabajos de limpieza y abrillantado de porcelanato rugoso en toda Navarra.
Para llevar a cabo este proceso, primero abrillantamos el suelo con productos de las marcas Polish Gres y Discolux, los cuales son como una especie de masilla que extendemos sobre el porcelanato, luego tratamos el mismo con un disco calentador térmico ya que el Polish Gres trabaja solo cuando el suelo está caliente.
Posteriormente, cuando el suelo se encuentra abrillantado, se limpia con un disco blanco y agua. Además, se utiliza el aspirador para recoger el agua que quede.
A causa de la gran resistencia que tienen este tipo de suelos, se suelen usar para locales y zonas de mucho tráfico. Es posible, por sus características, pulirlos como si fueran piedra, siempre y cuando el acabado así lo permita. Hay 3 pasos indispensables para el pulido de este material:
Dentro de las ventajas de contar con suelo de porcelanato se encuentra el aguante frente a diversas condiciones climatológicas durante todo el año; tiene propiedades antideslizantes, por lo que es ideal para pasillos y entradas; se adaptan a todo tipo de estilos; el cuidado de este tipo de suelos es sencillo.
El porcelanato es uno de los materiales favoritos y más usados en los suelos por sus cualidades estéticas y funcionales. Sin embargo, para mantener la elegancia de este material es necesario su cuidado, mantenimiento y limpieza.
En términos generales este cuidado va a consistir en limpiar, aplicar pasta para pulir porcelanato y, por último, fregar y secar su superficie. Pero, entrando más a detalle hay que decir que existen tres tipos de porcelanato: sin pulir, pulido y con textura. Debido a sus diferentes características físicas cada uno de ellos necesita de una rutina de limpieza y mantenimiento distinta.
Con el porcelanato sin pulir se ha de utilizar una esponja o cepillo suave para frotar el limpiador sobre él. Dicho producto no debe ser fuerte y se debe enjuagar en abundante agua limpia.
El porcelanato pulido, por otro lado, es muy delicado y por eso es muy importante saber cómo abrillantar porcelanato de manera adecuada. En este caso se debe usar una mopa o un paño no abrasivos, y nunca una escoba porque podría dañarlo.
Por último, el porcelanato con textura es el que más limpieza requiere ya que debido a su rugosidad se acumula mayor cantidad de polvo. Para realizar la tarea de limpiar suelo porcelánico rugoso se ha de barrer en todas las direcciones para así conseguir retirar toda la suciedad. Luego, con un detergente neutro y un cepillo de cerdas duras se debe limpiar la superficie y secarla con un trapo.
Si quiere que su porcelanato se conserve como el primer día, luciendo de manera impecable y teniendo una mayor vida útil, confíe sólo en profesionales que lleven a cabo el trabajo de pulir porcelanato.
En Pulimentos Abel y Fran llevamos más de 30 años trabajando de manera eficaz en este sector. Si tiene dudas acerca de cómo cuidar este tipo de suelos, ¡llámenos! Le ofreceremos un presupuesto personalizado y adaptado a sus necesidades.